domingo, 7 de diciembre de 2014

Carta al director


Estimado director:

                           

Como alumno de 4º de la ESO, quiero transmitir a través de esta carta un mensaje de protesta con el que nos solidarizamos muchos adolescentes en estas fechas navideñas, en las que más que nunca necesitamos tener una esperanza de un mundo mejor, más solidario y en el que el trabajo de nuestros padres parece ser un regalo caído del cielo. Me gustaría que los gobiernos se dieran cuenta de las necesidades que muchas familias en estas fechas se encuentran pasando y viviendo, y que nos dejáramos de jugar a ganar en las elecciones y procurásemos, en cambio, buscar soluciones reales y duraderas al problema del paro y corrupción que nos rodea y agobia por todas partes.

 

La voz de un niño no se escucha hasta que se hace adulto, pero quizás no tengamos tanto tiempo, ya que para entonces quizás sea demasiado tarde la posibilidad de arreglar la difícil situación en la que nos encontramos. Yo me pregunto ¿qué puedo estudiar que me permita encontrar un trabajo el día de mañana? También me pregunto ¿qué están haciendo los responsables para que los niños de hoy tengan un futuro mañana? Veo la actualidad y las noticias nos transmiten cómo la sociedad retrocede hacia peores condiciones de vida: sociales, laborales, económicas y en definitiva hacia un estado de empeoramiento total en vez de buscar el bienestar social en general.

 

Avanzamos en tecnología, retrocedemos en crear un futuro de esperanza, porque muchos ni siquiera tenemos esperanza de un futuro mejor. Todos somos responsables de crear un mundo mejor, pero la pobreza de mente, la falta de ética y moral cada vez más descarada, es la que especialmente nos ha convertido en una sociedad pobre, sin ilusiones, sin futuro, totalmente indefensa para reaccionar ante tanto desastre.Veo en los gobernantes, que son unos egoístas y que solo piensan en ganar las elecciones. Pienso que lo importante no es ganar, como siempre nos decían, sino aportar buenas y justas soluciones a los problemas de hoy en día.

 

La corrupción de la que cada vez más, los que pueden se aprovechan,  sea en forma de quedarse con dinero ajeno o sea en forma de engañar a los votantes y dejar el país y a sus gentes arruinadas, es la vergüenza y la herida más sangrante de nuestra sociedad, de la que no nos recuperaremos mientras la justicia no sea ejemplarizante con ellos, haciéndoles pagar económicamente y con cárcel por todo lo que se han llevado.

 

Por último, gracias señor director por escuchar el pensamiento y la voz de un adolescente encerrado en una sociedad que sufre los efectos de la crisis económica, provocada por la mala gestión de los que nos gobiernan.
 
 
 
 
 
 
 
 

domingo, 23 de noviembre de 2014

Escena del don Juan Tenorio


                        ACTO VII- ESCENA II

 

Estatua. Aquí me tienes, don Juan, y vienen conmigo los que de Dios están reclamando tu eterno castigo. Todos los que te odian están aquí hoy para llevarte al infierno. Has cometido muchos pecados y ha llegado el momento de poner punto y final a tu vida.

Juan. Es cierto que he hecho muchas cosas que están mal vistas, pero no voy a morir aquí y ahora.

Estatua. Yo creo que sí, te lo mereces.


Juan. No podréis ni tu ni tus amigos derrotarme, por cierto, ¿dónde están?


Estatua. Aquí mismo.


(De repente, se levantan de sus tumbas todos los muertos del cementerio).


Juan. ¡Jesús! ¡Menuda trampa!


Estatua. ¿Y de qué te alteras, si eres hombre que puedes hacerte platos con sus calaveras?
 

Juan. Me podría deshacer de un par de ellos, pero no creo que pueda con tantos.


Estatua. Quiero verte pelear y sufrir don Juan, al igual que han sufrido ellos contigo. Juntos te llevaremos al infierno, que es donde te mereces estar.


Juan. ¿No podríamos llegar a un acuerdo? No me gustaría morir de esta manera.


Estatua. No hay trato don Juan, todos disfrutaremos con tu sufrimiento. ¡Atacad!


(Los muertos llegan hasta don Juan, que se defiende de ellos con su espada).

 
Juan. He ganado muchas peleas, por lo que no me voy a rendir ahora.


(Cuando todos los esqueletos fueron derrotados por don Juan, este miró a la estatua de don Gonzalo y le apuntó con la espada).

Juan. Ahora te toca a ti.

Estatua. No te ceras que has ganado, solo has liberado a los fantasmas. 

(Rápidamente, de los restos de esqueletos salieron unos fantasmas terroríficos y con unos dientes muy afilados).

Juan. ¡Rayos! No me lo puedo creer. Ahora son más fuertes. ¿No te atreves a luchar contra mí tu solo?

Estatua. Me volverías a ganar y no conseguiría lo que quiero. Además no tengo ganas de luchar ahora. Ven conmigo al infierno, que es donde debes esta. El hacerlo difícil no te servirá de nada.

Juan. No voy a ir al infierno, tendrás que llevarme de alguna manera.

Estatua. Como desees.

(Los fantasmas se acercan a don Juan y le cogen de los brazos arrastrándole hasta el infierno. Aunque don Juan se resiste, no consigue evitar su muerte. Antes de morir don Juan consigue soltarse).

Juan. No moriré con miedo en el cuerpo.

(Después de decir esto corrió hasta donde estaba el portal del  infierno y se lanzó hacia él. Después de esto la estatua de don Gonzalo desapareció y los fantasmas también, junto con el portal).


miércoles, 1 de octubre de 2014

Autorretrato lingüístico:


Nací en Cantabria, una tierra en la que no existe más de una lengua y tampoco hay dialectos a nivel regional. Mis padres son de Burgos, por lo que no aprendí el castellano de Cantabria, sino el de Castilla y León, aunque son prácticamente lo mismo. El castellano de Castilla y León se caracteriza porque en él se comete todos los días el error de confundir el complemento directo con el complemento indirecto, lo que provoca el leísmo, el laísmo y el loísmo. En Cantabria también se confunde mucho (aunque un poco menos) el CD con el CI y al contrario.

Aunque casi toda mi familia ha nacido en Burgos, ahora mismo se encuentran en diferentes puntos de España como Madrid, Cataluña y  País Vasco. Aunque no les he escuchado hablar prácticamente nada en su segunda lengua, al hablar el español se les nota un acento, señal de que en algunas comunidades autónomas se habla el castellano de diferente manera en comparación a otras. Mi prima  desde hace unos 7 años vive en Bruselas (Bélgica) y es trilingüe, ya que allí se habla el francés, aunque ella también habla el inglés.

En infantil fue cuando comencé a aprender el inglés, pero solo algunas palabras, ya que en ese momento solo sabía escribir tres o cuatro cosas además de mi nombre. Desde entonces he ido aumentando mi vocabulario y gramática, además de que en ocasiones veo películas en inglés subtitulado en español. Es un idioma que me gusta y no me resulta difícil de aprender. Otra lengua que también conozco es el francés, que llevo viéndolo desde finales de primaria (no me acuerdo ahora mismo del curso) primaria. Conozco más palabras en inglés que en francés, ya que el inglés hoy en día es más importante.
 
He ido tres veces a Francia y gran parte del vocabulario que se puede ver en los restaurantes, cafeterías o algunas tiendas  lo hemos dado en clase, por lo que lo conozco. A Inglaterra no he ido todavía, pero preferiría visitar California (Estados Unidos). 
 
Me gustaría que se aprendiera el esperanto en todo el mundo y de esa manera solo tener que preocuparme de saber dos lenguas, porque aunque conocer muchas lenguas es bueno, lo mejor sería comunicarse con todo el mundo con una sola lengua.

domingo, 13 de abril de 2014

Redacción de ortografía


Hoy he quedado con todos mis amigos. Caminábamos tranquilamente cuando llegamos a un parque. Uno de ellos estaba con su monopatín cuando de repente se dio un golpe.

-          ¡Ay!, ¡vaya tortazo me he metido con esa valla!

-          ¿Te encuentras bien? A ver donde te has dado el golpe.

-          En el brazo derecho. Me duele mucho, espero no haberme hecho nada.

-          ¡Bah!, eso te dolerá un rato, pero poco a poco se te quitará el dolor.

-          Querría que me mirasen en casa y ponerme algo de hielo.

-          ¿Y por dónde se va?, que te acompaño.

-          Yo te guío.

En ese momento me despedí de los demás y como el brazo le seguía doliendo, mientras estábamos yendo decidimos coger el autobús.

-          ¡Hola chicos!, ¿qué tal lo habéis pasado?

-          ¡Hola mamá! Me he caído y me duele el brazo.

-          ¿Ah, sí?, déjame ver. Esto no es nada, te pongo un poco de hielo y ya. ¿Cómo fue la caída?

-          Me di contra una valla, Miguel lo vio.

-          ¿En serio?, pues quédate en casa y ya mañana si ves que te has recuperado bajas otra vez, pero aprovecha esta tarde para estudiar, que el jueves tiene examen.

-          ¡Jolines!, ¿No hay otra cosa que haya que hacer mejor que estudiar?

-          Sí, hacer los deberes de matemáticas.

-          Bueno, yo me voy que también tengo que hacer los deberes. ¡Adiós!

-          ¡Hasta luego!

Mi amigo no tuvo más remedio que quedarse en casa.Volví al parque tan cansado que las piernas me estaban empezando a decir basta.

-          ¿Qué tal está Antonio?

-          Bien, pero ahora tiene que descansar y hacer los deberes.

-          ¡Qué suerte!, mira este tubo tan raro que me he encontrado.


      -      Déjalo donde estaba. ¿Jugamos un partido?

-          Sí, ¿dónde?

-          Ahí en ese campo cercano.

-          Ese sitio es muy vasto, habrá que coger unas chaquetas y hacer unas porterías con ellas. ¿Dónde está el balón?
-     Cerca de ese haya hay uno, pero está sucio.
-      Da igual, jugaremos así.

Después del partido acabamos más o menos cansados.

-          ¿Te vas a quedar más?

-          No, vayámonos a casa ya, que .

-          Vale, hasta mañana.

 

domingo, 2 de marzo de 2014

Samuel Ramírez, un maestro que evita la piratería informática de alta tecnología en España.  


Samuel Ramírez, alumno de 3ºESO-A es, actualmente, muy valioso para evitar la piratería en nuestro país. Samuel se conoce todas las formas de piratería que existen, gracias a su pasado de hacker.

Cuando era un niño, Samuel solía utilizar el ordenador mucho antes de ir al colegio, ahí comenzó su vida de hacker. Samuel se metió en muchos líos, sobre todo, con descargas ilegales de música y películas y el pirateo de sus notas. Posteriormente, sus caminos se dirigieron a la piratería de la alta tecnología en las multinacionales, sobre todo,  en departamentos de I+D.

Salta a la fama gracias a que un amigo le comenta que su padre ha tenido un problema muy importante en su empresa, les han atacado espías informáticos robándoles un proyecto de desarrollo de un producto de altísimo valor en el mercado,  y cuyas consecuencias en caso de caer en malas manos serían terribles. Acude a su casa y el padre del amigo, reticente, al principio, pero muy desesperado por la gravedad del caso, acepta su ayuda y se da cuenta de su enorme potencial. Tras una noche intensa de trabajo soluciona el problema y la empresa agradecida decide contratar sus servicios como colaborador para blindar su sistema informático. Su fama aumentará gracias a sus grandes habilidades para su corta edad.

Samuel ha creado diferentes programas informáticos muy reconocidos  que hacen que estos piratas puedan ser encontrados más rápidamente. De hecho, grandes páginas piratas han sido cerradas gracias a su actuación y grandes empresas subsisten por esta misma causa.

Parece mentira pero la inteligencia de este chico ha evitado perdidas cuantiosas y ha permitido que la privacidad de los usuarios siga vigente. Debería ser un ejemplo para todos, excepto para los malos hacker, lógicamente.

Sus honorarios son millonarios y las empresas se rifan por tenerlo, pero él sólo colabora con el gobierno, gratuitamente por una buena causa.